martes, 31 de agosto de 2010

lunes, 30 de agosto de 2010

Suar, Siciliani, Peterson y Mike; amor y teatro

Adrián Suar y Mike Amigorena dos novios enamorados acompañaron a sus mujeres en la vuelta de “Corazon Idiota”.
En el Paseo La Plaza, en la Sala Pablo Neruda, se reestreno el espectáculo que protagonizan Carla Peterson y Griselda Siciliani en su segunda temporada y por ocho únicas semanas, y allí estuvieron Adrián y Mike con grandes ramos de flores para estar cerca de sus amores y compartir una noche de emociones.
Fue un hall llenó de famosos como,Solita Silveyra, Antonio Grimau, Millie Stegman, Mónica Antonópulos,Victoria Oneto, Virginia Innocenti, Romina Yan y Rocío Guirao Díaz embarazada de su segundo bebe, entre otros.
entre otros.









Fuente: http://www.laubfal.com/suar-siciliani-peterson-y-mike-amor-y-teatro/

Entrevista de Estricta



Fuente: canal de Youtube de "jazzgilr83"

sábado, 28 de agosto de 2010

Mike en Tendencia



Fuente: canal de Youtube de "jazzgirl83"

Mike en Agenda Nacional

Acá se puede ver el video:

Un unipersonal que interroga las certezas de la humanidad

Un escenario despojado, un texto ríspido y un intérprete comprometido con su trabajo son la base para “La noche antes de los bosques”, la pieza con la que se presentó Mike Amigorena en el teatro El Círculo.

La pieza del francés Bernard-Marie Koltés es el monólogo de un hombre que guía al espectador por un mundo que le resulta hostil. Extraviado en una noche, que puede ser metafórica o real, tiene objetivos tan básicos como establecer una mínima comunicación y encontrarle sentido a su vida.

Las respuestas a sus interrogantes les resultan esquivas aunque intenta hallarlas con obstinación. En el devenir de su caótico recorrido por esa suerte de noche primordial, que es como un camino hacia ninguna parte o en el mejor de los casos a lo que él presiente como una suerte de desdicha original inmanente al ser humano, se suceden los reclamos y la interpelación a seres que son objetos de amor y deseo.

Memoria fragmentada. El autor indaga en los tópicos de la angustia a través de este personaje que se siente abandonado y excluido, con una ilación fragmentada. Entre esos fragmentos se filtran jirones de una memoria surcada por el dolor y por una soledad que se presume irrevocable, la pérdida de algún tipo de inocencia irrecuperable y, finalmente, la frustración ante lo que, en principio, parece no tener solución.

Un planteo de esa magnitud requería de un intérprete que sostuviera durante una hora con su cuerpo y su gestualidad esa cadena de conflictos largamente enunciados por el personaje y discutidos consigo mismo.

Amigorena recurre a una serie de recursos físicos eficaces y muy bien resueltos a lo largo de la pieza cuya precisión fue contenida por la directora Alejandra Ciurlanti, en un trabajo por el cual el ex protagonista de “Los exitosos Pells” obtuvo un premio de la Asociación de Cronistas del Espectáculo (ACE).

La puesta en escena cuenta con una escenografía austera, ingeniosa y funcional, con una acertada, poética y asfixiante malla transparente rodeando al intérprete. Sobre la tela se proyectan palabras y figuras que acompañan los textos, la danza y el canto de Mike Amigorena.

Interpelación. El conjunto contribuye a darle forma a esta obra que interpela los presupuestos de un mundo basado en los códigos de “Occidente”, según lo plantea Koltés, a los cuales la puesta en escena traduce como una especie de prisión.

Esa apelación del personaje al funcionamiento social de esta parte del mundo en la que le tocó vivir es la fuente de sus reclamos y deseos y en definitiva lo que le hace desear tener “todo el cielo” para él y, finalmente, soñar con poder tirarse “a la sombra de un árbol”.

Compañía

La puesta en escena de Alejandra Ciurlanti apeló al recurso de ubicar a parte de los espectadores sobre el escenario, rodeando la especie de prisión de forma que las personas allí ubicadas fueron parte de ese mundo al cual interpela el personaje de Mike Amigorena. Ese decisión sumó potencia a una obra con múltiples lecturas.

Fuente: http://www.lacapital.com.ar/contenidos/2010/08/24/noticia_0030.html



jueves, 26 de agosto de 2010

"Hamlet"

Y al mencionar al nuevamente funcionario macrista Darío Lopérfido, diremos que ya se firmaron los contratos principales de su producción, “Hamlet”, que dirigirá Juan Carlos Gené. El protagonista es Mike Amigorena, el elenco se complementa con Walter Santa Ana, y le siguen Esmeralda Mitre, en el papel de Ofelia, Beatriz Spelzini y Horacio Peña, por ahora. La idea es comenzar a ensayar el 15 de enero en el teatro Apolo, donde estarían debutando en abril. De Alfredo Alcón a Amigorena. Fuerte apuesta.

Fuente: http://www.cronica.com.ar/lapavada/2010/08/26/

"Lo que el tiempo nos dejó"





Video La Nación:
http://videos.lanacion.com.ar/watch/16260



miércoles, 25 de agosto de 2010

"Lo que el tiempo nos dejó"

Adrián Caetano y Luis Ortega dirigirán un ciclo sobre el Bicentenario para TV

El pasado martes 24 de agosto se presentó en el Museo Sivori Lo que el tiempo nos dejó, un ciclo de seis telefilms que retratan, desde la ficción, historias referidas al Bicentenario
argentino y que están dirigidos por los cieneastas Adrián Caetano y Luis Ortega.

El proyecto, que se emitira por Telefe a partir del 1 de septiembre, aborda diferentes temáticas históricas que ocurrieron en el país durante los últimos 200 años. Protagonizado por un elenco rotativo conformado por actores de la talla de Cecilia Roth, Leonardo Sbaraglia, Leticia Brédice, Luciano Castro, Mike Amigorena, Nahuel Pérez Biscayart, Alejandra Flechner, Antonio Gasalla, Julieta Ortega, Fabián Vena, Julieta Díaz y Carlos Belloso cuenta con la supervización histórica de Felipe Pigna.

Para la dirección de estos especiales se convocó a Adrián Caetano (Francia, Un oso rojo), que ya habían realizado para televisión Okupas, Tumberos y Disputas y a Luis Ortega (Los santos sucios, Monoblock), en tanto que en los libros estuvieron a cargo de Patricio Vega, Marcela Guerty y Mario Segade.

Capítulos:

Mi mensaje: Este capítulo narra la historia de Elena, una joven enfermera perteneciente a una familia antiperonista, que cuidará a Eva Duarte en los últimos días de su vida. Durante ese tiempo, Elena ayudará a Eva a terminar “Mi mensaje”, su libro póstumo, y ambas estrecharán un intenso vínculo que transformará a Elena. Protagonizado por Laura Novoa (Eva) y Vanesa Gonzalez (Elena), junto a Alejandro Awada, Graciela Tenenbaum, Mex Urtizberea, Esteban Meloni y María Onetto. Libro: Marcela Guerty y Pamela Rementeria. Dirección: Israel Adrián Caetano.

La caza del ángel: Este capítulo narra la historia de Mabel, una mujer de clase media a quien le secuestran a su hija durante la última dictadura militar. En la búsqueda desesperada por hallarla, se unirá a otras mujeres en la misma situación. Protagonizado por Cecilia Roth (Mabel) y Mike Amigorena, junto a Alejandra Flechner, Jorge Suárez, Lidia Catalano, la participación de Verónica Llinás y la actuación especial de Antonio Gasalla. Libro: Mario Segade. Dirección: Israel Adrián Caetano.

Los niños que escriben en el cielo: Este episodio narra la guerra de Malvinas a través de los ojos de un niño de 10 años que escribe una carta a un soldado que nunca llegará a
destino. Protagonizado por Fabián Vena, Julieta Ortega y Carlos Belloso, con Claudia Fontán, Arturo Goetz y Sandra Mihanovich. Libro: Patricio Vega. Dirección: Israel Adrián Caetano.

La ley primera: A través de la historia de dos hermanos con ideologías contrapuestas, este capítulo retrata “La noche de los Bastones Largos”, ocurrido en 1966, durante la dictadura de Onganía. Protagonizado por Luciano Castro, Nahuel Pérez Biscayart y Luis Machín. Con Sofía Gala, Martina Gusman, Manuel Callau y Luis Ziembrowski. Libro: Patricio Vega. Dirección: Luis Ortega.

Te quiero: Este capítulo relata una historia de amor clandestina desarrollada en el universo tanguero de la década del 30 en Buenos Aires. Protagonizada por Julieta Díaz y Leonardo Sbaraglia. Con Cecilia Dopazo, Daniela Herrero, Hilda Bernard, Ana Celentano y Tina Serrano. Participación especial: Damián De Santo. Libro: Silvina Fredjkes.
Dirección: Israel Adrián Caetano.

Un mundo mejor: El episodio narra la historia de uno de los líderes del movimiento obrero, un joven anarquista de origen ruso que se enfrentará contra las fuerzas policiales de principios del siglo XX. Protagonizado por Rodrigo de la Serna, Leticia Bredice y Alejandro Urdapilleta. Libro: Patricio Vega. Dirección: Israel Adrián Caetano.

Fuente: http://www.escribiendocine.com/noticias/caetano-y-luis-ortega-dirigiran-un-ciclo-sobre-el-bicentenario-para-tv













Fuente: canal de Youtube de "jazzgirl83"




Fuente: canal de Youtube de "nicodelaplata22"





martes, 24 de agosto de 2010

“Nunca me quedo en lo fácil”

Mike Amigorena. El actor confesó que disfruta de su presente haciendo teatro y planeando un filme

Mike Amigorena dijo que sintió como un “desafío” encarar La Noche Antes de los Bosques. “Tuve la sensación de «esto no puedo no hacerlo». La pieza terminó adueñándose se mí”, dijo el actor sobre el texto del francés Bernard Marie Koltés, un unipersonal que indaga en “el estado del alma”. El ex protagonista de Los Exitosos Pells terminó de grabar su participación en el unitario Lo que el Tiempo nos Dejó, volverá al cine con una comedia con Natalia Oreiro y al teatro con Hamlet. “Uno tiene que meterse en determinados lugares que le provoquen desconocimiento porque si no probablemente me canse, y si me canso voy a cansar a la gente”, explicó.

—¿Qué te interesó del texto?
—Su crudeza, el misterio y a la vez la realidad, la atemporalidad. Yo no conocía a Koltés, me interioricé y sentí la sensación de “esto no puedo no hacerlo”. La pieza terminó adueñándose se mí. Me vi muy parecido a ese personaje. Así que lo tomé como un desafío y como un deber porque es una obra para la especie. Así lo siento. Es un diagnóstico del alma a través de este monodiálogo donde el espectador se va a ver reflejado.

—¿Cuáles son los temas centrales?
—Creo que uno de los temas centrales es cómo nos regimos. El texto habla de una gran soledad, cómo nos sentimos hoy estando con alguien, cómo somos extranjeros en nuestro propio país. Habla de una marginalidad letal, y pasa por la soledad, por nuestros padres, por quiénes nos rigen, para qué trabajamos, por qué, cuánto.

—¿Cuál fue el desafío que tuviste que enfrentar?
—Primero, estoy solo. Nunca había hecho un unipersonal, donde no hay vestuario, máscara, utilería; la escenografía es muy austera. De manera que estoy solo, despojado, con un texto súper difícil, que me llevó tres meses memorizarlo. Así que tomé como un gran desafío el hecho de comunicar esto sin máscara. Esta obra es como un gran concierto de piano, donde no puede haber fisuras. Para mí ése es el sueño, el trabajo de un artista. Hacer reflexionar, no solamente entretener. Por momentos es entretener, pero también cultivarlo, llenarlo. Eso para mí es como el objetivo del artista.

—¿Lo conseguiste hasta ahora con tus trabajos o a veces un artista también tiene que hacer concesiones?
—Yo voy en busca de eso. Ya no tengo 25 años. A medida que el artista va madurando creo que se encuentra con trabajos nutrientes, ya no se queda en la liviandad ni en la cáscara. De hecho a partir de enero empiezo a ensayar Hamlet. Es algo que necesito como nutriente para mí y después para el espectador, pero hay una necesidad personal de buscar y meterme en personajes en los cuales no sólo necesite desarrollar la capacidad creativa sino también la espiritual. Eso es lo que te da el poder de discernir.

—¿Qué matices se le puede dar a un personaje representado tantas veces?
—Ésta será la segunda vez que hago Shakespeare. Ya hice Shakespeare Comprimido en 2004. O sea que estoy interiorizado. El director será Juan Carlos Gené, nada menos, así que es cuestión de dejarme llevar. Hamlet es tan clásico y tan grande que uno no puede tener la pedantería de querer formatearlo, sí de darle otra textura y estoy seguro de que se la voy a dar. Gustará más o menos, pero le voy a dar mi estilo. Pero bueno, lo digo sólo a modo de ejemplo de lo que me está pasando, o sea que no es que solamente me interesa lo comercial, sino el desafío.

—¿Cómo influyó Los Exitosos Pells en tu popularidad?
—La televisión es una gran ayuda. La masificación ayuda a que te vayan a ver al teatro y que conozcan tu trabajo. Así que estoy muy agradecido a la televisión. Si vos la respetás te ayuda; si pensás que vas a vivir de ella y sacarle ventaja, estás perdido. Lo que hice fue hacer un trabajo que gustó, pero no pretendo estar haciendo todo el tiempo televisión. No me gusta y te destroza. Así que me parece que es cuestión de esperar el momento oportuno para volver.

—Y en cine volvés a actuar con Natalia Oreiro después de Miss Tacuarembó...
—Sí fue una película muy divertida, y ahora será Mi Primera Boda. Es el casamiento de un judío con una cristiana, es una comedia negra.

—En poco tiempo tuviste los premios Martín Fierro y ACE. ¿Cómo lo interpretás?
—Son un gran mimo de la industria, pero no me duermo en ellos. Pero más allá de los premios, uno se tiene que superar. No ser un obsesivo, pero sí tratar de superarse. Vuelvo a la palabra desafío: si me quedo en lo que mejor me sale, en lo más fácil, no cumplo con los desafíos. Uno tiene que meterse en determinados lugares donde te provoque un desconocimiento porque si no quizás me canse, y si me canso voy a cansar a la gente.

Fuente: http://edimpresa.unosantafe.com.ar/23.08.2010/noticias/42596_Nunca+me+quedo+en+lo+facil.html



Este martes se presenta oficialmente el unitario “Lo que el tiempo nos dejó”

“Lo que el tiempo nos dejó” es el ciclo de ficción unitarios episódicos, creados por Sebastián Ortega, y contará con seis Telefilms con motivo del Bicentenario argentino.

Cabe mencionar que es una coproducción Underground – Telefe y que la supervisión histórica está a cargo de Felipe Pigna, con Producción General de Pablo Culell.

A continuación, en detalle, los seis capítulos que se verán desde septiembre:

-“MI MENSAJE”: Elena , es una joven perteneciente a una familia anti peronista , que por vocación de servicio, estudia enfermería, y será elegida por Eva Duarte de Perón, para cuidarla durante la enfermedad, que termino llevándola hacia la muerte, en el año 1952. Durante ese tiempo, ambas estrecharan un intenso vinculo que transformara a Elena como persona, como mujer, mientras ayudara a Eva a terminar su libro postumo “Mi mensaje”.

Protagonizado por Laura Novoa (Eva) y Vanesa González (Elena), junto a Alejandro Awada, Graciela Tenenbaum, Mex Urtizberea, Esteban Meloni y Maria Onetto.

Libro: Marcela Guerty.. Dirección: Israel Adrián Caetano

-“LA CAZA DEL ANGEL”: Corre el año 1976 en Argentina, Mabel, es una mujer de clase media, a quien le secuestran a su hija, y que en la búsqueda desesperada por hallarla se unirá a otras mujeres, en la misma situación, para intentar saber donde están sus hijos. El nacimiento de las madres de Plaza de Mayo retratado a través de una conmovedora historia de ficción que muestra la valentía de un grupo de madres, frente al peligro que representaba la dictadura militar, y una sociedad en donde nadie sabia en quien podía confiar.

Protagonizado por Cecilia Roth (Mabel) y Mike Amigorena, junto a Alejandra Flechner, Jorge Suárez, Lidia Catalano, la participación de Verónica Llinas y la actuación especial de Antonio Gasalla.

Libro: Mario Segade: Dirección : Israel Adrián Caetano.

-“LOS NIÑOS ESCRIBEN EN EL CIELO”: La guerra de Malvinas, a través de los ojos de un niño de 10 años, que escribe una carta a un soldado, que nunca llegara a destino.

Protagonizada por Fabián Vena, Julieta Ortega y Carlos Belloso, con Claudia Fontan , Arturo Goetz y Sandra Mihanovich, junto a un grupo de niños surgidos de casting.

Libro: Patricio Vega. Dirección: Israel Adrián Caetano.

-“LA LEY PRIMERA”: El triste episodio de “la noche de los bastones largos” en 1966, que provoco la “fuga de cerebros” mas grande de nuestra historia, durante la dictadura de Ongania, a través de la historia de dos hermanos contrapuestos ideológicamente

Libro: Patricio Vega. Dirección Luis Ortega

Protagonizada por Luciano Castro, Nahuel Pérez Biscarat y Luis Machin. Con Sofía Gala, Martina Guzmán, Manuel Callau y Luis Ziembrowsky

-“Te quiero”: Ambientado en la década del 30 , en Buenos Aires, una historia de amor clandestina, desarrollada en el universo tanguero de aquella época. Basado libremente en historia de amor entre la cantante de tangos Ada Falcón y el compositor Francisco Canaro

Protagonizada por: Julieta Díaz y Leonardo Sbaraglia. Con Cecilia Dopazo, Daniela Herrero, Hilda Bernard , Ana Celentano y Tina Serrano. Participacion especial : Damián De Santo.

Dirección Israel Adrián Caetano. Libro Silvina Fredjkes.

-“Un mundo mejor”: La historia de uno de los lideres del movimiento obrero, a principios del siglo XX, un joven de origen ruso anarquista, que se enfrentara contra las fuerzas policiales de entonces.

Protagonizada por Rodrigo de la Serna y Leticia Brédice, y Alejandro Urdapilleta

Dirección : Israel Adrián Caetano. Libro: Patricio Vega.

Fuente: http://www.primiciasya.com/despliegue.php?idnoticia=83168

La Noche antes de los Bosques en Rosario.


























Nota en Rosario.



Fuente: canal de Youtube "redaccionON24"

La soledad como revelación

El actor Mike Amigorena, dirigido por Alejandra Ciurlanti, concreta una conmovedora e impactante versión del emblemático texto “La noche antes de los bosques”, del escritor francés Bernard-Merie Koltès

Ficha técnica
Autor: Bernard-Marie Koltès
Traducción: Silvana Stabielli
Dirección: Alejandra Ciurlanti
Actúa: Mike Amigorena
Escenografía: Alberto Negrín
Luces: Eli Sirlin
Diseño sonoro: Guillermo López
Música original: Iván Wyszogrod
Sala: El Círculo, viernes y sábado

(Publicado en El Ciudadano & la gente, en su edición en papel, del lunes 23)

Por Miguel Passarini

A corazón abierto y desgarrado, dispuesto a un nivel de entrega inusual para cualquier actor, pero sobre todo para uno que ya se ha consagrado y que se perfila entre los más interesantes y talentosos de su generación, porque entiende realmente por dónde va la actuación, dado que demuestra saber de qué se trata.
Así, Mike Amigorena confirma con su trabajo en La noche antes de los bosques, que viernes y sábado se presentó en el teatro El Círculo en el marco de una gira nacional luego de varios meses de temporada porteña (se estrenó en enero de este año), que la actuación, como decía Artaud, es ese punto intermedio entre la vida y la muerte, ese instante previo a todo, un momento “sagrado”, sobre todo si se elige correr el altísimo riesgo de ponerle el cuerpo a un texto como La noche antes de los bosques (o La noche justo antes de los bosques, en el original), del dramaturgo francés Bernard-Marie Koltès, un escrito sangrante, en primera persona, un tratado críptico y sinuoso sobre el sentido de la vida (“un monólogo de balance”, según el propio Amigorena), sobre la marginalidad, sobre el dolor y, en particular, sobre la pérdida, el abandono y la angustia, aunque sin puntos fijos, sin destino aparente, recortado y anárquico, lleno de preguntas dolorosas que, irremediablemente, quedan sin respuestas.
De todos modos, eso que la noche guarda celosamente, el actor lo pone en voz alta y frente al público, para que esas preguntas sigan dando vueltas en la cabeza de quienes las escuchan.
Un hombre perdido en la espesura de la noche, un “extranjero” en otras tierras, se va reencontrando con sus fantasmas, aunque en un primer momento crea ver a alguien con quien entabla un diálogo de respuestas silentes. Son momentos de su vida que lo marcaron, son esos instantes perniciosos que siempre están volviendo a la cabeza de cada uno para no hacer otra cosa más que daño.

Independientemente de la anécdota que lo llevó a iniciar semejante viaje, él está allí, omnipresente, pero nadie sabe su nombre, sólo que ha sido abandonado, en primer lugar por su madre, a la que buscará por los puentes de París, y después por el resto de la humanidad que como a tantos otros le suelta la mano.
Todo está dispuesto: la noche también está allí, “justo antes de los bosques”, porque el extraordinario dispositivo escénico la deja entrever, presentir, del mismo modo que a la lluvia o a la espesura de los árboles que terminarán “encerrándolo”.
La escenografía de Alberto Negrín no es para nada innovadora, pero sí da sentido a la puesta: un cortinado circular translucido engrandece las estupendas luces diseñadas por Eli Sirlin (como pocas, alguien que sabe acompañar la dramaturgia con sus propuestas), a lo que se suman una serie de proyecciones y el apabullante universo sonoro que encuentra en la música compuesta por Iván Wyszograd la mejor compañía para el desmesurado trabajo del actor, nunca más solo en escena, porque el personaje narrado por Koltès encarna a la soledad misma.
Estrenado en 1977 por el propio autor, La noche antes de los bosques se revela como un texto anticipatorio, de inmanente vigencia: encierra la tristeza y la zozobra propias de alguien que ha vivido en la post Segunda Guerra europea (nació en 1949), pero también el presagio de alguien que parecía saber (al menos en parte, así lo devela su escritura) que se iba a morir joven. Y así fue: en 1989, con 40 años, dejó de existir a causa del Sida. Pero quedó su obra, manifiesta, quebrada, también anticipatoria de un mundo habitado por seres humanos cada vez más despersonalizados por el avance de una tecnología que, detrás de su supuesto intento de acercar, aleja fatalmente, lo que vuelve a la obra universal y de una vigencia apabullante.
En ese contexto, con todos esos elementos en el cuerpo y en la cabeza, Mike Amigorena actúa, pero no sólo eso. Llega a un nivel de intensidad con el texto que le pasa por el cuerpo, lo atraviesa, se ve el dolor. Así, además de actuar, baila y canta maravillosamente, se enoja, duda, acciona contra el nihilismo de una escritura salvaje y voraz. También, saca a relucir el escepticismo de Koltès ante la imposibilidad de un mundo que cambie: el personaje está perdido pero a la vez “encerrado” (literal y simbólicamente), siente cómo el mundo mira de reojo su anarquismo ostensible, habla, habla y habla; dispara con las palabras y mira a los ojos: porque el dispositivo escénico permite que una veintena de espectadores estén allí, a centímetros de él, sentados en el mismo escenario, en lo que se revela como una experiencia compleja de describir pero, al mismo tiempo, sublime y maravillosa.
Más tarde, en medio del balance, hablará del sentido del trabajo y la responsabilidad, frente al placer del ocio tirado en el pasto; del significado de la palabra exclusión, del sentido de la felicidad y la pertenencia, del valor de lo material frente a eso más “intangible” que ofrece la vida. De todos esos pasajes, de esos momentos de dolor y fragilidad, Amigorena sale airoso, navega contra la corriente y consigue desenterrar la esencia del Koltès más visceral y verdadero.
Pero no conforme con Koltès y con la inteligente puesta que ha hecho de su obra la directora Alejandra Ciurlanti (Los padres terribles, Dios perro), Amigorena será, en 2011, Hamlet, de la mano de Juan Carlos Gené: qué mejor que su ambigüedad manifiesta, su voz profunda y grabe, y su inagotable galería de recursos, para prestarle el cuerpo al que quizás sea el más perturbado de los personajes shakespeareanos.


Fuente: http://puroteatrorosario.blogspot.com/2010/08/la-soledad-como-revelacion.html

sábado, 21 de agosto de 2010

Mike Amigorena: "El sueño de todo artista es hacer reflexionar"



Mike Amigorena dijo que sintió como un “desafío” encarar “La noche antes de los bosques”. “Tuve la sensación de «esto no puedo no hacerlo». La pieza terminó adueñándose se mí”, dijo el actor sobre el texto del francés Bernard Marie Koltés, un unipersonal que indaga en “el estado del alma” con el que se presenta hoy, a las 21.30, en el teatro El Círculo (Laprida y Mendoza). El ex protagonista de “Los exitosos Pells” terminó de grabar su participación en el unitario “Lo que el tiempo nos dejó”, volverá al cine con una comedia con Natalia Oreiro y al teatro con “Hamlet”. “Uno tiene que meterse en determinados lugares que le provoquen desconocimiento porque si no probablemente me canse, y si me canso voy a cansar a la gente”, explicó.

   —¿Qué te interesó del texto?
   —Su crudeza, el misterio y a la vez la realidad, la atemporalidad. Yo no conocía a Koltés, me interioricé y sentí la sensación de “esto no puedo no hacerlo”. La pieza terminó adueñándose se mí. Me vi muy parecido a ese personaje. Así que lo tomé como un desafío y como un deber porque es una obra para la especie. Así lo siento. Es un diagnóstico del alma a través de este monodiálogo donde el espectador se va a ver reflejado.

   —¿Cuáles son los temas centrales?
   —Creo que uno de los temas centrales es cómo nos regimos. El texto habla de una gran soledad, cómo nos sentimos hoy estando con alguien, cómo somos extranjeros en nuestro propio país. Habla de una marginalidad letal, y pasa por la soledad, por nuestros padres, por quiénes nos rigen, para qué trabajamos, porqué, cuánto.

   —¿Cuál fue el desafío que tuviste que enfrentar?
   —Primero, estoy solo. Nunca había hecho un unipersonal, donde no hay vestuario, máscara, utilería; la escenografía es muy austera. De manera que estoy solo, despojado, con un texto súper difícil, que me llevó tres meses memorizarlo. Así que tomé como un gran desafío el hecho de comunicar esto sin máscara. Esta obra es como un gran concierto de piano, donde no puede haber fisuras.Para mí ese es el sueño, el trabajo de un artista. Hacer reflexionar, no solamente entretener. Por momentos es entretener, pero también cultivarlo, llenarlo. Eso para mí es como el objetivo del artista.

   —¿Lo conseguiste hasta ahora con tus trabajos o a veces un artista también tiene que hacer concesiones?
   —Yo voy en busca de eso. Ya no tengo 25 años. A medida que el artista va madurando creo que se encuentra con trabajos nutrientes, ya no se queda en la liviandad ni en la cáscara. De hecho a partir de enero empiezo a ensayar “Hamlet”. Es algo que necesito como nutriente para mí y después para el espectador, pero hay una necesidad personal de buscar y meterme en personajes en los cuales no sólo necesite desarrollar la capacidad creativa sino también la espiritual. Eso es lo que te da el poder de discernir.

   —¿Qué matices se le puede dar a un personaje representado tantas veces?
   —Esta será la segunda vez que hago Shakespeare. Ya hice “Shakespeare comprimido” en 2004. O sea que estoy interiorizado. El director será Juan Carlos Gené, nada menos, así que es cuestión de dejarme llevar. “Hamlet” es tan clásico y tan grande que uno no puede tener la pedantería de querer formatearlo, sí de darle otra textura y estoy seguro que se la voy a dar. Gustará más o menos, pero le voy a dar mi estilo. Pero bueno, lo digo sólo a modo de ejemplo de lo que me está pasando, o sea que no es que solamente me interesa lo comercial, sino el desafío.

   —¿Cómo influyó “Los exitosos Pells” en tu popularidad?
   —La televisión es una gran ayuda. La masificación ayuda a que te vayan a ver al teatro y que conozcan tu trabajo. Así que estoy muy agradecido a la televisión. Si vos la respetás te ayuda; si pensás que vas a vivir de ella y sacarle ventaja estás perdido. Lo que hice fue hacer un trabajo que gustó, pero no pretendo estar haciendo todo el tiempo televisión. No me gusta y te destroza. Así que me parece que es cuestión de esperar el momento oportuno para volver.

   —Y en cine volvés a actuar con Natalia Oreiro después de “Miss Tacuarembó”...
   —Sí fue una película muy divertida, y ahora será “Mi primera boda”. Es el casamiento de un judío con una cristiana, es una comedia negra.

   —En poco tiempo tuviste los premios Martín Fierro, Clarín y ACE. ¿Cómo lo interpretás?
   —Son un gran mimo de la industria, pero no me duermo en ellos. Pero más allá de los premios, uno se tiene que superar. No ser un obsesivo, pero sí tratar de superarse. Vuelvo a la palabra desafío: si me quedo en lo que mejor me sale, en lo más fácil, no cumplo con los desafíos. Uno tiene que meterse en determinados lugares donde te provoque un desconocimiento porque si no quizás me canse, y si me canso voy a cansar a la gente.

Fuente: http://www.lacapital.com.ar/contenidos/2010/08/21/noticia_0010.html

Un estallido de palabras.


























ESTRENO EN GIRA. Mañana y el sábado, a partir de las 21.30, en el teatro El Círculo, Mike Amigorena protagoniza “La noche antes de los bosques”, la obra del malogrado dramaturgo y escritor francés Bernard-Marie Koltès

Por Miguel Passarini (publicado en El Ciudadano & la gente, en su edición en papel del viernes 20 de agosto)
“Este fue un regalo para mi corazón”. Esas palabras, escritas hace poco más de una semana por Mike Amigorena por si ganaba el premio de la Asociación de Cronistas del Espectáculo (ACE) al mejor unipersonal, dejaban entrever a un actor complacido, en un momento de gran plenitud artística. Y lo ganó, por su elogiado trabajo en La noche antes de los bosques, de Bernard-Marie Koltès (En la soledad de los campos de algodón, Roberto Zucco) como también se lo llevaron Eli Sirlin por las luces e Iván Wyszograd por la música original, los tres rubros en los que estaba nominado el espectáculo que mañana y el sábado, a las 21.30, desembarcará en teatro El Círculo (Laprida y Mendoza), en el marco de una gira. Actor y músico de vasta trayectoria teatral, llegó a Buenos Aires desde Mendoza a los 19 años (tiene 38), para estudiar actuación. Fueron muchos los años que pasaron desde aquél momento hasta que la televisión, que pareciera ser el único medio autorizado para legitimizar artistas, le dio el “batacazo” que le faltaba. Los exitosos Pells, de 2008, fue la plataforma de lanzamiento, aunque su cara ya era conocida por su paso por La cajita social club o Tiempo final, entre otros ciclos. Sin embargo, Mike Amigorena es mucho más que un simple actor televisivo que puede desdoblarse y componer las “dos versiones” del atildado Pells.
Amigorena es, en ciernes, un actor formado en el teatro; es ése mismo que con galanura compuso al pequeño ricachón de clase alta en la maravillosa El niño argentino, de Mauricio Kartun, y también el mismo que en 2011 será Hamlet de la mano de Juan Carlos Gené, porque, claro está, se trata de un actor afecto a correr riesgos. Tanto es así, que aceptó el desafío de un Koltès (1948-1989), de la mano de la directora Alejandra Ciurlanti, un autor complejo que, En la noche antes de los bosques, propone un diálogo para un solo actor, a partir de una estructura dialéctica en la que el otro personaje permanece silente. Es decir: un texto lleno de preguntas, de una poesía avasallante sobre esos seres de la noche, atormentados, que tanto conoció el autor, porque sabía (o creía saber), qué es lo que la noche oculta entre las sombras. Horas antes de la entrega de los ACE, cuando se aprestaba a mostrar el espectáculo en su Mendoza natal, Amigorena mantuvo una charla con El Ciudadano en la que habló del impenetrable y por momentos sinuoso texto del malogrado autor francés, de su pasión por el teatro, y de la televisión como “un trabajo más”.
“Las verdad que estar con esta obra en mi ciudad, Mendoza, en el teatro Independencia, y los ACE, después de la excelente temporada en (el complejo teatral porteño) La Plaza, es de una gran satisfacción, es el summum”, relató el actor, anticipando los entretelones de una charla en la que mostró a la persona detrás del personaje, un actor reflexivo que está muy lejos de encandilarse con un éxito fugaz.



—Tras el reconocimiento masivo de “Los exitosos Pells”, ¿necesitabas correrte de la televisión y volver al teatro como ese lugar de protección que por lo general representa un escenario para los actores?
—En mi caso personal, y a lo largo de la carrera, sino busco desafíos me voy aburriendo de lo que mejor me sale; entonces es como que después de la televisión, está bueno resguardarse en el teatro y hacer este texto que es súper complejo y que además no conocía a Koltès, su autor. Tampoco es que me haya distanciado de la tevé, simplemente terminó un ciclo en relación con la televisión, como va a terminar un ciclo en el teatro, quizás para volver a la televisión o al cine. Siento que va a ser así toma mi carrera: de una textura a la otra, porque sino no hay desafío para mí, no me divierto, y si yo no me divierto, no se va a divertir ni el acomodador.

—Venías de hacer “El niño argentino”, entre otros trabajos, pero Koltès suele ser un salto al vacío ¿Tuviste esa sensación cuando leíste el texto la primera vez?
—Sí, nunca nada tan exigido como Koltès: acá estoy solo en el escenario, cuando antes, siempre estuve acompañado y con textos más terrenales. Este es un texto poético, súper crudo, que toca las vísceras de cada uno de nosotros, es un balance del alma: en su escritura están retratados los marginales, los lúmpenes, las drogas; es un autor siempre ligado a una especie de sufrimiento, mostrando su verdad, porque también es un texto muy reflexivo.

—¿Compartís la visión de que en el espectáculo se juega una especie de gran instalación que conforman la escenografía de Alberto Negrín, las luces de Eli Sirlin, el diseño sonoro de Guillermo López y la música de Iván Wyszogrod, además de la dirección de Alejandra Ciurlanti?
—Esto que decís confirma que estoy dentro de un hecho artístico, generado por un equipo de primera: yo soy el que pone el cuerpo, la cara, pero detrás hay un equipo de excelentes creadores que me acompañan, por eso siento que estoy resguardado por los mejores.

—Si tuvieras que describir algunas de las sensaciones que te pasan por el cuerpo con este personaje, ¿cuáles serían?
—Son todas, porque me pasan cosas todo el tiempo, soy yo reflejado, hay mucho de mí en él, es una obra reveladora tanto para mí, que la interpreto, como para el que la ve. Es más, siento que es una obra fundamental para la especie humana porque creo que Koltès la escribió para que sea una especie de Biblia y se pueda hacer siempre, por el resto de los días, porque es un texto absolutamente atemporal. Pensá que la escribió en 1977 y, hoy por hoy, es lo más figurativo que hay; me da orgullo y me siento un privilegiado por poder representar este texto no sólo en Buenos Aires sino ahora de gira por todo el país.

—¿Te imaginabas la carrera que tenés hoy, que implica el apoyo del público y también de la crítica, en tu Mendoza natal, cuando de adolescente decidiste estudiar actuación?
—No lo sé, pero es algo que agradezco, porque siento que es verdad: percibo el apoyo del público y de los críticos, pero no te puedo decir mucho más sobre el tema, porque lo único que hice hasta ahora fue trabajar para esto, trabajar para que se luciera lo que hago, trabajar desde el corazón para la gente y, evidentemente, eso es consecuente hacia la prensa en general y hacia la crítica en particular. En realidad, siempre me han tratado bien, pero por otro lado yo he sido siempre muy respetuoso de lo que hago y del público; siento que no podría hacer algo que moleste, más allá de que guste o no lo que esté haciendo, pero siempre teniendo en cuenta un sentido de la estética y con el corazón, y eso, por lo general, es como un pasaporte hacia algo que tiene que ser bueno.

—Este año, también te dedicaste al cine, un medio en el que, tengo entendió, te interesa incursionar.
—Sí, ahora estoy por rodar una comedia negra junto a Natalia Oreiro con quien ya hicimos Miss Tacuarembó, y el año próximo esperamos que se concrete el proyecto de la adaptación cinematográfica de El niño argentino que tiene pensada rodar Luis Puenzo (La historia oficial).

—Volvés pronto a la televisión con un personaje complejo, dentro del ciclo “Lo que el tiempo nos dejó” que se conocerá por Telefé ¿Esa también fue una elección?
—Sí, y vuelo al principio, al tema de los desafíos: “El beso de Judas”, que así se llamará el capítulo (también podría llamarse “La caza del ángel”, que retrata desde la ficción el nacimiento de las Madres de Plaza de Mayo, y contará con Cecilia Roth, Alejandra Flechner, Jorge Suárez, Lidia Catalano, Verónica Llinas y la actuación especial de Antonio Gasalla), fue lo más difícil que me tocó hacer hasta ahora, porque es un personaje de una gran crueldad, pero me gustó hacerlo, más allá de que puede resultar un personaje odiado porque es un buchón que se infiltra entre las Madres de Plaza de Mayo diciendo que está buscando a su hermano y después las termina delatando y las Madres terminan siendo chupadas por los militares. Es horroroso pensar que esto pasó, porque las Madres de Plaza de Mayo lo adoptan, en cierta forma, como si fuera un hijo.

—Luego de Koltès, Shakespeare, porque en 2011 vas a hacer “Hamlet”, dirigido por Juan Carlos Gené ¿Cómo llegás a ese personaje soñado por muchos y logrado por muy pocos?
—¿Sabés una cosa? Yo creo que los personajes me buscan a mí y no al revés, y no es pedantería: todo lo que me pasa es una consecuencia del trabajo, son 20 años de teatro, me vine a Buenos Aires desde Mendoza a los 19, y recién hace cuatroaños que vivo de mi trabajo, con mucha dedicación. Pero hay un momento en todo ese proceso que la cabeza funciona de tal manera que no hay posibilidad de error. Hamlet será otro gran desafío de esos que te hablé al comienzo.

—¿Son importantes los premios para un artista que comienza a transitar un camino de éxito?, ¿son la confirmación de algo?
—Los premios son gestos de la industria y no podría ser tan pedante de decir que no me interesan, porque sí me interesan, pero lo más grande para mí es poder sentir el regocijo del público, esa gente que me espera a la salida del teatro para darme un abrazo y contarme aquello que la obra le provocó: hay gente que me dice que empezó a replantearse cosas de su vida después de ver este espectáculo, y eso no tiene comparación con nada, porque siento que para eso soy artista. O bien que la gente se pueda acostar con una sonrisa viéndome en la tele, esos son los verdaderos premios para mí. El disfrute y el punto de vista del público, es lo que te toca el corazón de verdad.

—¿Sentís que el medio artístico argentino estaba preparado para recibir a un personaje como vos, con tus particularidades? Hay gente que cree que, por ejemplo, sos excéntrico porque te ponés una falda o jugás con cierta ambigüedad.
—Creo que si el medio no estaba preparado, es un problema del medio, porque no solamente tendría que estar preparado para mí, sino que la vida es así, atípica. Unos creen estar preparados para tantas cosas y a veces la vida cambia de un momento a otro y no estabas preparado para nada. Hace unos días se casó en Buenos Aires la primera pareja gay y detrás vinieron y vendrán otros, y hace diez años atrás, a los gays los cagaban a tiros en la calle. Entonces, en buena hora si mi aparición en el medio sirve para cambiar algo, porque todo lo que hago, lo hago para bien, y si algo cambia, mucho mejor.

viernes, 20 de agosto de 2010

Los falsos perfiles en las redes sociales.

La usurpación afecta a actores, cantantes, políticos, filósofos y ciudadanos comunes. Los problemas que ocasionan y los más plagiados.
Por Raquel Roberti

La noticia estaba servida: “Si huggies saca a florencia peña de sus filas, la campaña podría hacerla @hectortimerman, que no va a lo de leuco porque se cagó (sic)”, decía el mensaje firmado por @pepeeliaschev en la red Twitter. Y a los pocos minutos el ministro de Relaciones Exteriores respondía desde su cuenta @hectortimerman: “Aquí están todos los mails intercambiados con Leuco. Ustedes verán que recién hoy me dice que lleve videos (cont) Twitlonger: Aquí están todos los mails intercambiados con Leuco. Ustedes verán que recién hoy me dice que l”. Al ingresar a ese enlace, se leía, entre otras aclaraciones: “...Ya salió el resentido de Eliaschev a insultarme, muestran la hilacha”. Poco tardó Clarín en levantar los mensajes y construir una noticia que publicó en la página 13 de la edición del miércoles 18 pasado. Errores que se cometen al confiar en que los que están detrás de las cuentas de Twitter son quienes dicen ser. En este caso, doble error: de Clarín y el de Timerman. En la red abundan los falsos perfiles y el de @pepeeliaschev es uno de ellos.

“Al responder a un anónimo, que usurpa torpemente mi nombre, el ministro reveló su inexistente prudencia y ausencia de tino como funcionario del Estado –señaló el verdadero Pepe Eliaschev–. Jamás uso ese lenguaje soez, ni tuve participación en el debate.” El periodista, cuya cuenta es @peliaschev, consideró que el episodio permite preguntarse si un país puede tener un canciller “que ‘twittea’ todo el día sin siquiera verificar quién le escribe y a quién le contesta”.

El equívoco en las redes sociales no es patrimonio de Timerman, Clarín y Eliaschev. El filósofo León Rozitchner también estuvo envuelto en una disputa ficticia con su hijo Alejandro (asesor de Mauricio Macri) gracias a un usurpador de identidad virtual. “Con mi hijo podré tener diferencias pero mantengo una relación amorosa. Fue él quien me advirtió y a su vez hizo gestiones para cerrar esa cuenta. Pero estos malentendidos crean distancias y diferencias, emputeciendo la comunicación”, dijo el filósofo, indignado porque debe ocuparse de “enviar fotocopia de mi documento por correo. Es una vergüenza, puede ocasionar tráfico de influencias y estoy seguro de que genera descreimiento en los medios de comunicación.” Dos días después de esta conversación, la cuenta fue cerrada.

En el ranking de los personajes públicos más plagiados Luisana Lopilato encabeza la lista, pero a diferencia de Rozitchner, no se preocupó por cerrar alguna de las 147 cuentas que llevan su nombre. Abrió @lulopilato, con 180 mil seguidores, que tiene el sello de verificación de Twitter (un círculo con una tilde). La identidad se refuerza al leer los twitts que dan cuenta de su actividad diaria. Lo extraño es que @lulylopilato200, cuyo único mensaje es en respuesta a @davids0325: “Gracias sos re lindo claro que lo agregare beso xio”, tiene 1.200 seguidores. Y @Iulopilato, también con un único twitt: “Me doy”, 785. ¿A quién y qué sigue la gente en las redes sociales?

El actor Mike Amigorena, que no tiene Twitter ni Facebook, donde hay una decena de apócrifos, cree que la gente sabe que esos perfiles son falsos, “al menos quienes es imprescindible que lo sepan. Es arbitrario, me parece raro, pero ¿qué es raro hoy? La gente está desequilibrada, ojalá fuera sólo eso, hacerse pasar por otro”. Amigorena no se desvela por desmentir, “prefiero gastar energía en otra cosa. No puedo estar ante la PC más de diez minutos, no me entretiene mostrar mi vida a la gente. Estas redes son del tipo ‘trato de venderte’ y después son una cárcel, como el débito automático. Ni siquiera bajo ringtones porque no hay discreción, es un medio obsceno para tenerte controlado”.

*La nota completa, en la edición impresa de Veintitrés

Fuente: http://www.elargentino.com/nota-103386-No-soy-yo.html

Mike en la radio.

Radio Uno entre mil:
19/08/2010. Mike Amigorena II
El actor nos visitó esta mañana y estuvimos charlando largo y tendido, repitiendo algunas de las cosas que nos había dicho la primera vez que lo sacamos por teléfono.

Aquí tienen 30 minutos de "La noche antes de los bosques", la vida, las convicciones, el éxito y otras yerbas.

Link: http://www.unoentremil.com.ar/novedades.php


Radio Rock & Pop (Rosario):
Link de descarga: http://www.divshare.com/download/12319722-fd3


Radio 2:
Link de descarga: http://www.mediafire.com/?3uq90c27f2e9019


Fuente: webconferencia.net

lunes, 16 de agosto de 2010

Orgulloso y en crecimiento.



Mike Amigorena está en Mar del Plata y dialogó con El Atlántico. (Foto Diego Izquierdo)

Con tres Ace bajo el brazo y la propuesta para ser Hamlet, Mike Amigorena llegó a Mar del Plata para presentar este domingo el halagado unipersonal “La noche antes de los bosques”. En la previa, dialogó con El Atlántico de premios, TV, teatro y también tuvo tiempo para el amor...

“Es una obra conmovedora y fundamental para la especie, para que la gente la vea, se sienta identificada, recapacite, reflexione acerca de cuáles son su hábitos, cómo lleva su vida, cuáles son sus valores, la soledad, los padres, el amor…es super profunda”. Así resume y promociona Mike Amigorena a “La noche antes de los bosques” obra para un solo personaje que gano días atrás, tres Premios ACE (por su actuación, iluminación y música original) y con la que llega hoy al Teatro Auditórium, en el marco de su gira nacional.

Esta pieza de Bernard Marie Koltes, se presentará a las 21 en al sala Astor Piazzolla bajo la dirección de Alejandra Ciurlanti, con “un equipo de primera que aportó lo propio para hacer un proyecto sin precedentes” según define el actor.

Protagonizada por Mike Amigorena, trata la historia de un hombre -cuyo nombre desconocemos- que ve a otro hombre en la calle, en medio de la noche, bajo la lluvia y trata de conseguir que lo acompañe, que se quede con él. La obra es un monólogo de balance. Es un viaje a lo más íntimo, es un himno al amor por sombras maternas, por ángeles en medio del caos. Es una metáfora del reencuentro con la naturaleza.

Después de seis meses en el porteño Teatro la Plaza, “con una respuesta del público muy positiva y alentadora”, Mike llegó nuevamente a la ciudad y dialogó con El Atlántico acerca de los premios y los grandes personajes próximos a interpretar.

- ¿Que significó recibir un ACE?

- Me dio un poco de orgullo y una alegría tal, porque hubo mucha entrega, mucho trabajo, mucho ensayo. Es un obra muy difícil entonces que la asociación te premie es un mimo. Tenía muchas ganas de hacerla aunque al principio no la entendía por lo compleja. Pero después empezó a adueñarse de mí de tal manera que no podía no hacerla.

- ¿Fue más difícil de lo esperado crear este personaje?

- Si… (piensa) pero no fue una sorpresa, se fue desarrollando todo muy paulatinamente. A su tiempo se fueron viendo los resultados.

- ¿En qué sentís que te hizo crecer y te exigió esta obra?

- Como actor, como persona, porque vos para hacer un personaje así tenés que tener una madurez como persona. No podés hacer esto a los 22-25, tenés que tener una vida recorrida, más allá del actor. Me llegó en el momento justo, es una obra que viene como a templar el instrumento a mis 38 años. Fue todo muy orgánico, no fue nada sobreexigido. Alejandra Ciurlanti, la directora, fue precisa en lo que pedía, en lo que quería, lo que tenía en la cabeza se llevó a cabo. No hubo un sufrimiento o una frustración que por lo general en muchas obras de teatro, a medida que las vas ensayando, te decepcionas porque el director te pidió algo y no lo entendés o no le das lo que quiere. Acá hubo una simbiosis y una comprensión llamativa.

- Para los actores el mejor momento siempre está por venir. Pero se podría decir que este, para vos, es excelente, si sumamos el cine y la participación que se viene en “Lo que el tiempo nos dejó”.

- Sí. Es una participación muy buena…representar a las Madres de Plaza de Mayo, trabajar nuevamente para Underground…en fin, es como una consecuencia de un gran trabajo, de toda una vida de trabajo.

- ¿Cómo será específicamente el personaje en el unitario?

- Es un militar que se infiltra entre un grupo de madres que buscan desesperadamente a sus hijos y es por él que se funda Madres de Plaza de Mayo.

- ¿Para cuándo una vuelta más prolongada a la tv?

- (Rápido y seguro) A fines del año que viene.

- ¿Por qué ya existe una propuesta o por ganas propias?

- Las dos cosas. Hay una propuesta muy remota, está la intención, no se sabe qué.

- Digamos que después de Los Pells “la propuesta” quedó hecha de manera permanente…

- Lo agradezco mucho que sea así. Pero este año necesitaba volver al teatro a las fuentes.

El nuevo Hamlet

Como ya anunció en anteriores charlas con este medio, próximamente (en octubre, para ser más precisos) comenzará a filmar su segunda película junto a Natalia Oreiro (participó en Miss Tacuarembó) que se llamará “Mi primera boda” y será dirigida por Ariel Winogrand. “Es una comedia negra que muestra el casamiento entre un católico y una judía y a lo que eso conlleva” adelanta.

Pero lo que más ansias le genera, es su próximo proyecto teatral, el cual llegó, nada más y nada menos, que a través del reconocido Juan Carlos Gené: Mike Amigorena será “Hamlet” en el 2011.

“En enero la empezamos a ensayar para estrenarla en mayo”, comenta el actor, que estará acompañado por Esmeralda Mitre y Beatriz Spelzini.

“Me viene en este momento oportuno. Hay una organicidad. Me imaginé un momento así pero después de hacer “La noche…” pensás que no hay más que hacer y pum, viene Hamlet”, dice, casi como pensando en voz alta.

Y el desafío será grande, ya que nunca interpretó este personaje (ni en sus clases de teatro) y además “no es fácil hacerlo. Hice en su momento “Shakespeare comprimido” que pasaba por las 36 obras de él, deteniéndonos especialmente en Romeo y Julieta, Magbet, Hamlet y Ricardo III. Vi muchas de sus obras pero llegar a hacer enteramente Hamlet es un orgullo, un remezón al corazón”, afirma.

Por todo esto es que “La noche…” terminará su gira nacional en las próximas semanas, aunque “al parecer el año que viene vamos a los festivales internacionales”.

Tiempo para el trabajo… tiempo para el amor

Hace tiempo que Mike Amigorena ya no anda solo por la vida. Por eso no fue raro verlo ayer por la tarde muy bien acompañado por su flamante pareja, la actriz Carla Peterson. Luego de un buen almuerzo y antes de ingresar al hotel con vista al mar en el que se hospedaron, en su auto con vidrios polarizados (pero no tanto), se propiciaron algunos arrumacos antes de enfrentar al curioso mundo que los rodea y al cual, bien se sabe, no les gusta hablarle de su intimidad. Así las cosas, “Martín Pells” se quedó en el hotel mientras que “Sol”, con un colorido poncho y lentes negros, se fue a dar una vuelta en el auto. Sin dudas, afortunados en el trabajo y en el amor.

Ambulancia